
Quiero imaginar un mundo distinto para tí
Sin los campos regados con lágrimas y sudor
Sin pájaros de acero con la muerte acechando
Y sin niños hambrientos con muecas de dolor
Quiero creer que un día la justicia vendrá
Que ya no habrá más cárcel ni penas que sufrir
Al nacer tiene el Hombre, blanca y pura su alma
La corrompe y la mancha solamente al vivir
Quiero pensar en tiempos de paz y libertad
Cuando el miedo ya no haga la piel estremecer
Cuando pueda expresarse libremente una idea
Cuando una voz no ahoguen los tiranos de ayer
Tú vivirás, mi nieto, en un mundo ideal
Sin luchas fratricidas, sin angustia y dolor
Porque llegó la hora, tú vas a construirlo
Contando con la ayuda de Dios, Nuestro Señor.
(Roberto Romero, 19/02/72)
0 comentarios:
Publicar un comentario